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Receta de Compota de manzana casera

Compota de manzana casera

3.6 (271)
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Cómo hacer compota de manzana. Compota clásica y casera al método tradicional, en cazuela. Una de las mejores recetas de mi madre Rosa, deliciosa.

Ingredientes

6 raciones

  • 1 kg. y medio de las manzanas que más os gusten (os recomiendo Reinetas o Golden)
  • 330 ml de agua
  • 120 g. de azúcar (blanquilla o morena)
  • Una cucharadita de zumo de limón
  • La piel (sin el blanco) de una naranja
  • 1 ramita de canela (o media cucharadita tipo postre de canela molida)

Preparación

40 minutos
  1. Lo primero sería elegir las manzanas que vas a emplear, tal como veréis en las fotos del paso a a paso, emplee unas manzanas feuchas que me regaló mi padre, son pequeñitas y con un pequeño punto de acidez.
  2. Es una manera de aprovechar todo lo que da el campo y convertirlo en algo rico rico. Pero la opción más sencilla es ir al supermercado o a vuestra frutería de confianza.
  3. Elegid una manzana que se ablande fácilmente al cocer, quizás unas Golden o las Reineta, son las mejores para esta receta, se cuecen muy rápido y se queda muy blandita, deshaciéndose con facilidad.
  4. Pon en un cazo o cazuela (depende de la cantidad de compota que vas a preparar) el agua, el azúcar, las gotas de limón y la piel de la naranja.
  5. La piel del cítrico va a aromatizar un poco la compota dándole un toque sutil que combina perfectamente con la canela y la manzana.
  6. Llevas a ebullición a fuego medio para que el azúcar se disuelva poco a poco y deja durante un par de minutos hasta que se forme almíbar.
  7. Este debe ser casi jarabe sin que llegue a ser caramelo, debe ser ligero pues aún va a cocer más con las manzanas.
  8. Lava las manzanas, pela y descorazonamos las manzanas. La piel no la tiréis pues tiene contiene pectina, este hidrato lo contienen casi todas las frutas, pero las manzanas la tienen en altas cantidades.
  9. La pectina es muy soluble en agua y se une con el azúcar y los ácidos de la fruta para formar un gel.
  10. Así que, si añades la piel de las manzanas a nuestras compotas o mermeladas caseras, lo que consigue es espesar de forma natural nuestra conserva.
  11. De esta forma añades menos azúcar y lo que es muy importante disminuimos el tiempo de cocción, lo que se traduce en que nuestra mermelada va a mantener mucho más el sabor a la fruta en fresco.
  12. Trocea y añades las manzanas a la cazuela justo cuando el almíbar está hecho y sigue burbujeando un poco.
  13. Pon la ramita de canela o la canela en polvo y remueve.
  14. Introduce la piel de dos manzanas por encima, tapa y cocina a fuego medio-bajo, hasta que las manzanas adquieran un color pardo y estén blanditas (media hora, más o menos).
  15. El tiempo depende un poco de la variedad de manzana y del tamaño de los trozos.
  16. Hay que estar atentos durante la cocción para que no se te seque, añades agua si es necesario, prueba y si te gusta más dulce puedes añadirle más azúcar.
  17. Recordad que podéis hacer de esta compota una base para un dulce sencillo, el dulce de manzana que tanto gusta en el blog es una gran opción. Si te gusta la compota, te gustará este postre.
  18. Dependiendo para que la vas a emplear la puedes servir en trozos grandes como la de la foto o pasarla por la batidora para obtener una textura parecida a la mermelada.
  19. Incluso en una textura intermedia, si la queréis casi como un puré, basta con machacarla con un tenedor. Eso queda a vuestra elección, no te preocupéis, que va a a estar igual de deliciosa.
  20. La compota de manzana es un acompañamiento lleno de posibilidades, perfecto en todo tipo de postres.
  21. Pero también para platos salados de carne como el pollo asado, carne de caza como el pato o un buen solomillo ibérico, aunque te recomiendo que si va con carne reduzcáis la cantidad de azúcar a la tercera parte. Probad estas combinaciones y ya me contaréis.