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Receta de Cómo hacer tequeños de queso venezolanos

Cómo hacer tequeños de queso venezolanos

3.7 (50)
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Cómo hacer tequeños o pasapalos venezolanos. Receta fácil de una masa frita rellena con queso, jamón y queso o dulces. Paso a paso con fotos y vídeo para que te queden perfectos.

Ingredientes

8 raciones

  • 1/2 kg. de harina de trigo con fuerza W220 o harina de trigo con 11,5 - 12,5 % de proteínas
  • 1 huevo grande
  • 120 g. de mantequilla
  • 1/2 cucharada de sal
  • 110 ml de agua tibia
  • Queso blanco duro llanero (el de San Simón da Costa Daniberto de Galicia Calidade le va perfecto) cortado en palitos de unos 7 x 2 cm.
  • 100 g. de jamón cocido o jamón de pavo (para hacer 2 tipos de tequeños)
  • Aceite de oliva virgen extra suave para freir

Preparación

60 minutos
  1. Pon en un bol grande la harina de trigo excepto unas 2 cucharadas de harina que deja para ir engordando la masa.
  2. Con una cuchara debes hacer un hoyo en el centro del bol, echa la mantequilla cortada en dados y el huevo.
  3. Introduce el agua tibia y sal. Bate con una cuchara de madera desde el centro hacia afuera y vas poco a poco mezclando con la harina.
  4. Sigue removiendo con las manos lo que empieza a ser la masa, por ahora será una mezcla pegajosa pero firme.
  5. Prepara la zona donde vas a amasar, la encimera de la cocina es perfecta.
  6. Espolvorea la zona con harina, saca la masa del bol y empieza a trabajarla. Es muy importante el refinado para que quede más elástica, estira la masa como un churro y la retorcemos en espiral varias veces.
  7. Al final vuelve a juntar y amasar de nuevo durante unos diez minutos. Este es el truco que hace que la masa quede perfecta.
  8. Después de esos 10 minutos podremos manipular la masa con más rapidez ya que irá quedando elástica y homogénea. La medida de harina correcta es “hasta que la masa no se pegue a las manos”, pero tampoco se debe abusar. Recordad que la cantidad depende de la harina que vayáis a utilizar, pues no siempre vienen de moliendas iguales, ni el tipo de trigo es el mismo.
  9. Vas convirtiendo la masa en una bola. Coge el anterior bol, lo enharina y metes la bola dentro. Tapa el bol con un trapo de algodón durante unos 30 minutos.
  10. Cortas la masa en dos trozos y en la encimera de la cocina la trabaja con los dedos hasta que te quede una superficie plana.
  11. Espolvorea un poco de harina y sigue estirando con la ayuda de un rodillo.
  12. Cuando la masa quede fina, cortas en tiras uniformes. Con ellas forra los palitos de queso sin que te quede ningún hueco para que no escape el relleno cuando los friamos. El queso con el calor del aceite se puede salir y no quieres que ocurra esto.
  13. Los primeros son muy fáciles de hacer, los de queso. Vas enrollando la masa alrededor del queso cómo si fuesen las vendas de una momia.
  14. Los de jamón y queso. Primero el queso, luego los cubre con una loncha de la misma altura que el queso, deben ser lonchas finas. Y luego cubre con la masa.
  15. La única dificultad de esta receta está en la temperatura del aceite, ya que si está poco caliente la masa cae al fondo, pero si está demasiado caliente se te dorarán muy rápido y el queso no quedará cremoso por dentro.
  16. La primera tanda te servirá para probar las siguientes y que te salgan de rechupete.
  17. Echa a la sartén nuestros tequeños. Cuando estén dorados los saca a un papel absorbente. Así ya estarían perfectos, pero yo los dejaría enfriar un poquillo por si te quemamos.
  18. La historia de los tequeños se remonta a finales del siglo XIV. Dice la leyenda que una cocinera de la Ciudad de Los Teques. Ella elaboraba un alimento de forma cilíndrica, con masa restante de los pasteles típicos de la zona y le colocaba un poco de queso blanco y suave en forma de barrita en su interior.
  19. En esta época la ciudad de Los Teques era una zona vacacional de las familias más acaudaladas de Caracas, y hasta la capital llegó su fama, pasando a ser un clásico en todo tipo de festejos.
  20. Otros dicen que su nombre es debido a la familia Baéz, que inventaron el pasapalo, muy similar al tequeño. Esta familia llevaba sus pasapalos a la estación El Encanto hasta Caño Amarillo en Caracas y cuando llegaban eran tan famosos que la gente gritaba: ¡Llegaron los tequeños! refiriéndose a la gente de Los Teques y con el tiempo este nombre sustituyó al pasapalo.
  21. Los más atrevidos dicen que son de origen zuliano, que nacieron en la Villa del Rosario a comienzos de siglo XX, creados por un señor de origen italiano y de apellido Franco. Sea una u otra la historia real, este plato ha traspasado fronteras y lleva con orgullo su nombre por todo el mundo, todo un homenaje a los cocineros de Los Teques.