Caldo blanco gallego con repollo

Cómo hacer el caldo gallego más humilde, el caldo blanco con repollo. Receta de caldo con patatas, alubia blanca, repollo, unto y un poquito de carne de cerdo. Paso a paso con fotos y consejos

• 400 g. de repollo blanco
• 400 g. de patata gallega
• 150 g. de habas o alubias blancas
• 20 g. de unto o manteca de cerdo
• 2 zanahorias
• 1 oreja y 1 rabo de cerdo ahumadas
• 1 chorizo gallego ahumado
• Sal fina (al gusto)
• Un chorrito de aceite de oliva virgen extra

1. Como he comprado unas alubias blancas secas, envasadas al vacío, es necesario ponerlas en remojo de víspera, el día anterior. Al menos deben de estar unas 10-12 horas en agua templada, con un puñado de sal, y que cubra por completo las alubias.
2. Antes de comenzar con la receta, las pasadas por agua para quitar impurezas, y de paso revisa si hay alguna alubia estropeada o demasiado dura. De esta manera te evitarás encontrárnosla en el caldo.
3. Si vas a darle mayor consistencia al caldo pon en remojo las partes del cerdo saladas: oreja y rabo. Cambiando por lo menos una vez el agua (al igual que en el cocido gallego).
4. Antes de empezar, escurre bien los ingredientes y reserva. Pon al fuego una cazuela grande con agua, unos 5 litros aproximadamente.
5. Pon las alubias blancas en una cazuela con agua fría, las deja en remojo durante unas 12 horas aproximadamente.
6. Introduce las habas que teníamos en remojo, el chorizo, la carne y el unto. Deja cociendo a fuego medio durante una hora, espumando de vez en cuando.
7. Pela las patatas y las zanahorias. Cortas las patatas en dados, lascas o laminadas, como más te gusten. Las zanahorias suelo cortarlas en rodajas finas. Se añade todo a falta de 15 minutos de la cocción final del caldo, es decir cuando el caldo lleva unos cuarenta minutos al fuego.
8. Una vez que ha pasado la hora de cocción, retira la carne y el chorizo y reserva.
9. Lava y trocea la verdura, en este caso he empleado repollo blanco. Lo añades al agua de cocción con las patatas y cuece durante unos veinte minutos más.
10. Es hora de probar de sal y ver si necesita, aunque no suele hacer falta pues la carne ya lleva sal. Le aportan un punto de sal que no se ha eliminado de todo en el remojo previo.
11. Pica en trozos pequeños la carne y el chorizo e introduce al caldo. Remueve para juntar todo. Le des el toque final con un chorrito de aceite de oliva virgen y ya está.